domingo, 27 de septiembre de 2015

Dos Atributos Claves de los Muy Exitosos

SERIE LIDERAZGO Y DESARROLLO PERSONAL
Aporte Nº 32
Dos Atributos Claves de los Muy Exitosos
Debemos demostrar un real compromiso por alcanzar nuestras metas siendo disciplinados y controlados
Por Rubén Alfonzo
20 de septiembre de 2015



Dos atributos que exhiben los muy exitosos son su autodisciplina y su auto-control. Dos cualidades muy importantes que les permiten enfrentar las distracciones, eventualidades, circunstancias y retos que se les presentan de forma continua en su devenir diario.
Somos seres humanos y con frecuencia nos conseguimos con distracciones internas y externas que desvían nuestra atención de lo prioritario e importante hacia lo cómodo y superfluo.
Debilidades como la flojera, los miedos y las dudas, entre otros, son factores internos que inciden en nuestro actuar ante decisiones sobre iniciar o continuar un proceso para realizar nuestros planes y tareas.
Entre las distracciones externas tenemos a personas y actividades que captan nuestra atención e inmediatamente nos ponemos manos a la obra a atenderlas o hacerlas desviándonos del propósito que nos tenía haciendo lo que estábamos haciendo.
¿Qué causa que suspendamos lo que estamos haciendo y lo reemplacemos por otra actividad? ¿Qué nos lleva a darle una mayor prioridad a eventos o solicitudes que no la merecen en ese momento? Para después sentirnos miserables, molestos y frustrados al final del día por no haber logrado lo que habíamos planeado y que, en ocasiones, era vital haber culminado satisfactoriamente. ¿Qué impide que digamos NO?
Es aquí donde se marca la diferencia entre los muy exitosos y el resto. Los muy exitosos tienen las cualidades de la autodisciplina y el auto-control.
La autodisciplina es esa virtud de poder realizar las cosas que debemos hacer independientemente de si nos gustan o no.
Cuando estamos yendo tras una meta, tenemos muchas actividades por realizar. Algunas no son de nuestro agrado pero reconocemos que debemos hacerlas para poder lograr la meta satisfactoriamente. Otras las desconocemos y buscamos las formas y vías para aprender de ellas y a cómo realizarlas. Es una combinación de conocimientos y desconocimientos que transformamos en conocimientos.
El auto-control es la virtud de poder decidir apartar o eliminar de nuestra vida o proceso aquellos eventos y cosas que nos gustan y nos llenan de placer pero que nos desvían o impiden que logremos la meta que nos hemos planteado.
Tomemos como ejemplo a una persona que decide escribir un libro y se ha puesto como meta escribir una página de 300 palabras diariamente. Un día cualquiera, llega a su casa cansado y exhausto de una jornada dura en su trabajo, y están pasando un juego de su equipo del cual es fanático furibundo. Le toca decidir entre ver el juego con la excusa del descanso, comerse alguito echado en el sofá sabroso, acompañado con una cervecita bien fría y, por supuesto, vistiendo la camisa del equipo, o ir a su escritorio, comerse alguito acompañado de un juguito o un té, colocar una música de fondo que le permita su concentración, ponerse a golpear las teclas de su laptop para producir esa página de 300 palabras que es su meta del día y, antes de acostarse, revisar en Internet para saber cómo quedó el juego.
Este ejemplo sencillo y común permite visualizar la autodisciplina y el auto-control.
Preguntas de Reflexión:
·         ¿Eres consecuente y enfocado en tus metas?
·      ¿Qué cambios de actitud realizarás para no permitir que eventos y cosas te desvíen de tus metas?
·   ¿Cómo comunicarás tu decisión de mantenerte apegado a tu plan de trabajo de forma asertiva?

Marshal Goldsmith: “Nuestro ambiente nos tienta muchas veces al día para que caigamos y nos involucremos en discusiones y acciones estériles.”

sábado, 26 de septiembre de 2015

Haciendo Congruente la Intención y la Acción



SERIE LIDERAZGO Y DESARROLLO PERSONAL
Aporte Nº 31
Haciendo Congruente la Intención y la Acción
Nuestras acciones están ligadas a nuestras intenciones
Por Rubén Alfonzo
27 de junio de 2015
En días pasados hubo mucho comentario en los medios de prensa venezolanos sobre la expulsión de Fernando Amorebieta durante el juego contra Perú que terminó con las aspiraciones de Venezuela para mejorar su desempeño logrado en la Copa América del 2011 y avanzar a niveles superiores.
En los medios de comunicación, el tema que los comentaristas trataban era sobre la relación entre “la intención y la acción” involucrada en esa falta cometida por Amorebieta.
No voy a escribir sobre fútbol ni sobre esa fatídica tarjeta roja pero el concepto captó mi atención porque incide sobre la forma de vivir de muchas personas.
Diariamente estamos expuestos a esta situación: “intención y acción”. De ella se desprenden por lo menos cuatro combinaciones de tipos de personas:

1.    Sin intención y sin acción: este grupo de personas son aquellas que viven el día a día sin esperanzas ni sueños. Son como autómatas que buscan que cada día pase lo más rápido posible con el menor esfuerzo y preocupaciones posibles. Se conforman y viven de lo que producen en el día. Son personas que deambulan por la vida con una actitud pesimista o indiferente. Se puede incluir a aquellos que laboran toda la vida en trabajos donde solo subsisten y su ingreso está basado en los aumentos de sueldos por decreto gubernamental o de la empresa, y por promociones que la empresa les ofrezca. Son temerosos y su autoestima es muy baja. Es algo así como vivir en el cementerio donde el tiempo transcurre sin que nada pase.
2.    Sin intención y con Acción: este es el caso de aquellas personas que tampoco tienen metas o sueños y quienes por cuestiones del destino se encuentran con el éxito o el fracaso de forma súbita o inesperada. Les apareció una oportunidad y actuaron sin tener idea del resultado positivo o negativo que encontrarían. Al igual que los anteriores, son temerosos y su autoestima es muy baja.
3.    Con intención y sin acción: Hay personas que tienen sueños y visiones sobre lo que quieren lograr y llegar a ser en la vida. Deseos de conquistar grandes cosas pero no actúan porque no creen en ellas o que las puedan lograr. Al no accionar no obtienen los resultados imaginados y esos grandes sueños y esperanzas se transforman en simples anhelos. En el fondo nunca quisieron lograrlos. Soñar no tiene costo. En este caso es solo usar el tiempo (recurso no renovable) para imaginar.
4.    Con intención y con acción: este es el grupo de las personas que desean un futuro mejor y brillante, que sueñan grandes cosas para ellos y su familia, que tienen metas positivas y constructivas en la vida y que actúan en consecuencia con decisión y esperanza. Su actitud positiva y orientada al éxito los llena de pasión, entusiasmo y perseverancia. Saben donde se encuentran en el presente y adonde quieren llegar. Fijan planes de largo plazo, de 5 a 10 años, y después definen los escalones o metas de corto plazo para ir construyendo la escalera que los llevará al éxito. Toman decisiones sobre cómo adquirir los conocimientos y habilidades para lograrlas efectivamente. Si se caen, se levantan. No se dejan destruir o distraer por los obstáculos, desviaciones, tentaciones e inconvenientes que normalmente se presentan en la vida. Su visión personal de éxito es la fuerza que determina sus acciones.
Para empezar a construir tu futuro de éxito, solo necesitas un papel y un lápiz para escribir tus sueños y metas. El futuro lo construyes dando el primer paso.
Preguntas de reflexión:
·         Al analizar fríamente la forma en que piensas y actúas sobre tu futuro ¿con qué grupo te identificas?
·         ¿Has puesto en blanco y negro tus metas y sueños?

·         ¿Ya trabajas en la consecución de tus metas? Si no lo haces aún, ¿crees en tus metas?

Sígueme por Twitter (@rdap56) e Instagram (@rubenalfonzo56) para que recibas diariamente mis mensaje reflexivos, cortos y efectivos que estoy seguro te catapultarán hacia la construcción exitosa de tu Visión personal.

Me encantaría poder conocer tus comentarios sobre estos planteamientos que he compartido contigo. Recuerda tu feedback o retroalimentación es una información que me permite corregir y mejorar.
Si crees que a alguien que tu conozcas, el contenido de este mensaje le pueda servir, por favor re-envíaselo.

LA INTELIGENCIA COMERCIAL

Por Rubén Alfonzo 25-04-2021 La Inteligencia Comercial (IC) es el proceso por el cual el liderazgo comercial de una empresa decide transform...