SERIE LIDERAZGO
Y DESARROLLO PERSONAL
Aporte Nº 32
Dos Atributos Claves de los Muy Exitosos
Debemos demostrar un real compromiso por alcanzar nuestras metas siendo
disciplinados y controlados
Por Rubén Alfonzo
20 de septiembre de 2015
Dos atributos que exhiben
los muy exitosos son su autodisciplina y su auto-control. Dos cualidades muy
importantes que les permiten enfrentar las distracciones, eventualidades,
circunstancias y retos que se les presentan de forma continua en su devenir
diario.
Somos seres humanos y con
frecuencia nos conseguimos con distracciones internas y externas que desvían nuestra
atención de lo prioritario e importante hacia lo cómodo y superfluo.
Debilidades como la
flojera, los miedos y las dudas, entre otros, son factores internos que inciden
en nuestro actuar ante decisiones sobre iniciar o continuar un proceso para
realizar nuestros planes y tareas.
Entre las distracciones
externas tenemos a personas y actividades que captan nuestra atención e
inmediatamente nos ponemos manos a la obra a atenderlas o hacerlas desviándonos
del propósito que nos tenía haciendo lo que estábamos haciendo.
¿Qué causa que suspendamos
lo que estamos haciendo y lo reemplacemos por otra actividad? ¿Qué nos lleva a
darle una mayor prioridad a eventos o solicitudes que no la merecen en ese
momento? Para después sentirnos miserables, molestos y frustrados al final del
día por no haber logrado lo que habíamos planeado y que, en ocasiones, era
vital haber culminado satisfactoriamente. ¿Qué impide que digamos NO?
Es aquí donde se marca la
diferencia entre los muy exitosos y el resto. Los muy exitosos tienen las
cualidades de la autodisciplina y el auto-control.
La autodisciplina es esa
virtud de poder realizar las cosas que debemos hacer independientemente de si
nos gustan o no.
Cuando estamos yendo tras
una meta, tenemos muchas actividades por realizar. Algunas no son de nuestro
agrado pero reconocemos que debemos hacerlas para poder lograr la meta
satisfactoriamente. Otras las desconocemos y buscamos las formas y vías para
aprender de ellas y a cómo realizarlas. Es una combinación de conocimientos y
desconocimientos que transformamos en conocimientos.
El auto-control es la
virtud de poder decidir apartar o eliminar de nuestra vida o proceso aquellos
eventos y cosas que nos gustan y nos llenan de placer pero que nos desvían o
impiden que logremos la meta que nos hemos planteado.
Tomemos como ejemplo a una
persona que decide escribir un libro y se ha puesto como meta escribir una página
de 300 palabras diariamente. Un día cualquiera, llega a su casa cansado y
exhausto de una jornada dura en su trabajo, y están pasando un juego de su
equipo del cual es fanático furibundo. Le toca decidir entre ver el juego con
la excusa del descanso, comerse alguito echado en el sofá sabroso, acompañado
con una cervecita bien fría y, por supuesto, vistiendo la camisa del equipo, o
ir a su escritorio, comerse alguito acompañado de un juguito o un té, colocar
una música de fondo que le permita su concentración, ponerse a golpear las teclas
de su laptop para producir esa página de 300 palabras que es su meta del día y,
antes de acostarse, revisar en Internet para saber cómo quedó el juego.
Este ejemplo sencillo y
común permite visualizar la autodisciplina y el auto-control.
Preguntas de Reflexión:
·
¿Eres consecuente y enfocado en tus metas?
· ¿Qué cambios de actitud realizarás para no
permitir que eventos y cosas te desvíen de tus metas?
· ¿Cómo comunicarás tu decisión de mantenerte
apegado a tu plan de trabajo de forma asertiva?
Marshal
Goldsmith: “Nuestro ambiente nos tienta muchas veces al día para que caigamos y
nos involucremos en discusiones y acciones estériles.”